El día elegido para la entrega del título honorífico fue la tarde del 30 de noviembre, el lugar señalado fue el auditorio «Walter Heinze» de la Escuela de Música, Danza y Teatro «Prof. Constancio Carminio» de la FHAyCS. Mientras el salón va siendo ocupado por los concurrentes, los abrazos se multiplican, es que ha llegado la hora del reconocimiento y es el turno de la Mg. María del Rosario Badano.

La docente está por recibir la máxima distinción que otorga la Universidad Pública y las presencias expresan y representan los diferentes espacios de la vida por los que María del Rosario Badano transitó, dejando su inigualable impronta. Representantes del ámbito académico, de las organizaciones de DDHH, sociales y políticos, familiares, amigos dan cuenta del recorrido y la trayectoria que han signado la vida plena de Rosario.

Innumerables obsequios llegaron a sus manos. La música de la Profesora Nilda Godoy y José Bulos y un emotivo video a través de testimonios sentidos narró su vida y describió como sienten a Rosario en sus afectos.
La entrega del Título de rigor, fue recibido con una ovación en un hermoso auditorio emocionado y expectante a cada detalle del Acto.
Rescatamos ahora las palabras.

María Gracia Benedetti: «Rosario, embajadora de la esperanza»

En representación de la FHAyCS, una de las instituciones que promovió la distinción de María del Rosario Badano con el Título Doctora Honoris Causa, habló su decana, Mg. María Gracia Benedetti. «En este momento histórico complejo de la Argentina, es una alegría colectiva y un acto de resistencia que nos reúne y nos enorgullece», manifestó.

Luego de hacer un recorrido discursivo por los distintos espacios e instituciones académicas que compartió junto a Rosario Badano, Benedetti trazó una reseña de las diferentes facetas en la que la distinguida docente se destacó.

En esa trayectoria que describe Benedetti, encontramos en Badano el compromiso con la educación pública y con la universidad, con un proyecto de país más justo e igualitario; sobreviviente de la dictadura y autora con otras tantas compañeras del libro colectivo «Nosotras en libertad»; pionera productora de conocimiento y pensamiento crítico sobre la educación como derecho, el trabajo docente, el campo científico, la universidad pública, el Eurocentrismo; las Políticas de ingreso; las memorias y los derechos humanos en la universidad; pedagoga, referente regional, nacional, recorriendo universidades públicas de Argentina y de América Latina, haciendo docencia de grado y posgrado, asesorando equipos, siendo Jurado de concursos, evaluando investigaciones, participando de distintos foros, presentando libros; tejedora y sostenedora de redes promoviendo la conformación de trabajos interuniversitarios e interinstitucionales; tejedora y sostenedora de redes promoviendo la conformación de trabajos interuniversitarios e interinstitucionales; generosa, confiando en las generaciones de jóvenes estudiantes y egresados, empujando el proyecto de creación de la Universidad Nacional Juan Laurentino Ortiz.

A esa polifacética personalidad que la Decana de Humanidades describe en Badano, concluye con una frase que la sintetiza: «Rosario, embajadora de la esperanza».

Luciano Filipuzzi: «Siempre estuvo luchando»

El rector de la UADER, Abog. Luciano Filipuzzi agradeció a las autoridades presentes de las diferentes facultades y universidades como así también a las Organizaciones y al público en general que se acercó para acompañar a María del Rosario Badano a recibir la distinción.

Fillipuzzi indicó que con el título de Doctora Honoris Causa se reconoce una trayectoria de vida que en el caso de Rosario abarca la lucha por la defensa de los ideales en los años juveniles, el sufrimiento de la tortura en los años de la dictadura, la vida académica que en Badano es muy trascendente pero, fundamentalmente, el Rector destacó el papel desempeñado en la UADER, participando en todos los procesos de la vida de la Universidad. «Siempre estuvo luchando», afirmó el Filipuzzi

«Debe haber unas 10 personas que tienen que ver con la etapa constitutiva y fundacional de la UADER y que han marcado su historia. En eso siempre ha estado el espíritu de Rosario, delimitando cada una de las políticas y de las definiciones que se fueron tomando en la universidad. La UADER tiene un poco del tu ADN incorporado a su identidad. Y eso que hoy quizá no nos damos cuenta, con el tiempo va a ser valorado, y en eso UADER te debe todo. Más allá de tu carrera vas a dejar plantada una bandera que va a perdurar en el tiempo», estimó el Rector.

 

María del Rosario Badano: «Este reconocimiento, que es singular a mi persona, lo asumo como parte de la generación diezmada, a la que pertenezco»

Las palabras de la Mg. María del Rosario Badano giraron en torno a los agradecimientos y los recuerdos. «Quiero agradecer la razón por la que cada uno vino hoy acá», manifestó para abrazar a un público variado que se acercó a acompañarla desde los distintos ámbitos de la vida académica, social y política por los que la docente transitó a lo largo de su vida y que aún lo hace.

«El agradecimiento, sin dudas, es a la universidad pública, laica y gratuita y, en ella, a la UADER en sus 23 años de historia, de construcción colectiva de debates y embates políticos y académicos y que asume el coraje y el horizonte de sentido de mirarse y distinguir a una de sus docentes. Gracias infinitas por este gesto», expresó.

Un sentido y necesario recuerdo fue el que Badano dedicó a quienes formaron parte de la Facultad y que «estarían hoy acá». El recuerdo fue para Rosa Salamone, Marcela Fumaneri, Horacio Saucedo, Referentes y hacedores de sedes como Norma Beninca y Osvaldo del Monte. «Cada uno de ellos habita en nosotros y en la institución», sostuvo.

«Este reconocimiento, que es singular a mi persona, lo asumo como parte de la generación diezmada, a la que pertenezco. De un colectivo, mucha gente y geografías contiene este diploma, mucha alegría, mucha búsqueda, tristeza, convicciones y persistencia hay adentro de él», señaló.

«Me han escuchado decir que soy hija de la universidad pública, en ella he crecido, me he desarrollado en sus diferentes dimensiones y he habitado cada una de ellas; algunas inaugurándolas, otras habitándolas, otras produciendo, llevando adelante políticas y prácticas en el que el derecho a la educación ha sido un eje central en mi trabajo. Estuve en la inauguración de UNER y de UADER y presenciaré la de Juan L. Ortiz», enfatizó la flamante Doctora Honoris Causa.

En otro momento de su discurso, María del Rosario Badano hizo un compendio de su trayectoria. «Soy testiga de mi tiempo histórico, estudiante secundaria, ligada a los movimientos cristianos, militante universitaria en JUP en los 70`, la cárcel durante los 8 años de dictadura y luego partícipe de los 40 años de esta construcción democrática», sintetizó

En ese sentido, Badano agradeció a María Teresa Sirvent y a Germán Cantero por haberla iniciado en la investigación en CONICET; también mencionó el encuentro con la UBA y el Instituto de Ciencias de la Educación, la vuelta al estudio, la docencia, la investigación; a la maestra de maestras Amanda Toubes.

Un capítulo especial le dedicó a recordar su paso por la Facultad de Trabajo Social de UNER, a partir de 1992. «Una institución en la que me formé y desarrollé, aprendí funciones y tareas, dirigí proyectos de investigación, armé equipos de cátedra, proyectos pedagógicos, publiqué libros, armamos redes universitarias de trabajo para caminar los temas y generar las propuestas fue mi fuente de aprendizajes de mundos otros y de transformación en docente e investigadora universitaria . Mi gratitud a la institución y a las y los diferentes colegas que a lo largo de los años fueron parte de este trayecto», destacó.

En ese recorrido, Badano hizo mención al espacio de trabajo y de producción en AGMER y CTERA, junto a Clelia Lavini, Blanca Benavidez, Beatriz Montaldo, Amalia Homar y Miguel Duhalde.

«Y con UADER desde su creación a hoy he estado en sus procesos generativos, en las discusiones y acuerdos, en la transformación de los Institutos en Facultad, en el desarrollo de la cultura universitaria. Universidad que me brindó la posibilidad de organizar y normalizar Humanidades de 2009 a 2012», recordó.

Como se sabe, María del Rosario Badano es una reconocida militante por los Derechos Humanos, en esa dirección también fueron sus palabras de agradecimiento: «A mis compañeras y compañeros de La Solapa que se encuentran presentes de DDHH y del colectivo de ex presas con quienes compartimos los horrores de la dictadura, cárceles y testimoniamos lo vivido ante la justicia, construyendo procesos democráticos en cada lugar que habitamos en clave de Memoria Verdad y Justicia».

«A los integrantes de las redes que fuimos tejiendo como modo de hacer universidad pública con el ingreso, asesoría, el trabajo docente, las prácticas, los DDHH. En cada una de ellas el pensar con otros y otras ha posibilitado construir otras realidades, la red de DDHH del CIN, impensable en otro momento, es un mojón que marca camino y me llena de orgullo que hoy pueda seguir habitando en el sistema universitario», también dedicó la distinción.

Finalmente, Badano hizo una dedicatoria especial del título de Doctora Honoris Causa a las estudiantes detenidas desaparecidas de la dictadura cívico-militar y especialmente a los estudiantes de UNER y UTN de esta provincia, «compañeros y compañeras de militancia que posiblemente podrían estar hoy en mi lugar recibiendo este reconocimiento».

Seguidamente Rosario brindó su clase magistral «Cuarenta años de democracia: sentidos y perspectivas de la Universidad Pública» que será motivo de otra nota.

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:: Nota y fotos: Secretaría de Comunicación Institucional FHAyCS UADER