Victor Basterra, sobreviviente y fotógrafo de la Ex Escuela de Mecánica de la Armada, relató a los ingresantes de la FHAyCS su rescate de las imágenes que componen la muestra «Rostros, fotos sacadas de la ESMA». La muestra permanecerá exhibida en la galería de la Secretaría de Extensión y Derechos Humanos, planta baja de la Escuela Normal.
La actividad fue organizada por el Área «Ingreso, Permanencia y Egreso» de la Secretaría Acádemica en conjunto con el Área de Derechos Humanos de la Secretaría de Extensión de la FHAyCS en el marco de la Agenda M (Mujeres, Memoria y Malvinas). Hasta el Jueves 19 de marzo, en conmemoración del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia se podrá visitar la muestra.
Desde agosto de 1979 hasta diciembre de 1983 permaneció en cautiverio y fue obligado a falsificar documentación. Basterra se arriesgó a conservar las fotografías que sirvieron en el Juicio a las Juntas¸ «Mis conocimientos en gráfica y fotografía me permitieron sobrevivir pero también me permitieron lograr esta muestra. Cada foto tenía su cuota de riesgo pero para mi era importante correrlo y tuvo, por suerte, un buen final».
A Basterra se lo llevaron de su casa el 10 de agosto de 1979 junto a su compañera de entonces, Dora Laura Seoane, y a la hija de la pareja, María Eva, que tenía tan sólo dos meses y diez días de vida. Su pareja y su hija fueron liberadas una semana después; «En un momento de mi activismo caí en manos de la dictadura cívico militar y permanecí por más de cuatro años en un centro clandestino de secuestro, tortura y exterminio».
Basterra, ante la atenta mirada de los jóvenes estudiantes, relató «en el curso de mi cautiverio les fui útil a los tipos para la elaboración de documentación falsa». Según narró, la documentación falsa que utilizaban los militares les servía para muchos fines: «para hacer los operativos en los lugares que iban porque tenían credenciales policiales, cédulas de identidad, DNI y registros de conductor todos falsos, con otros nombres. Esos nombres eran tomados de personas reales».
Basterra, entre otras tareas, tenía que sacar las fotos de los represores «Debía sacar 4, tomaba 5 y me quedaba con una». Además de las fotos de los represores, pudo recuperar negativos de fotos que les tomaban los represores a los desaparecidos. «Recuperar esas fotos fue un poco de suerte y también un poco de temeridad, porque era una bolsa de negativos y la iban a quemar. Yo vi que había rostros. Entonces, levanto un negativo, miro y en el fotograma estaba yo». Escondiéndolas entre sus ropas u ocultándolas entre los fajos de papel fotosensible, sustrajo diversas fotografías de ROSTROS que sirvieron como el primer y más contundente testimonio gráfico de secuestros clandestinos, en ese predio militar.
El 3 de diciembre de 1983 fue liberado, un años después, junto con el CELS, Basterra armó una carpeta y a fines de julio de 1984 hicieron la presentación ante el Juzgado Número 30, «Esta muestra lo que fundamentalmente trató es ir contra la impunidad. Acá están los rostros de torturados y desaparecidos, también de torturadores y desaparecedores. Ese signo que se dio en la EX ESMA y atravesó a toda la sociedad a lo largo de los años todavía está presente».
El fotógrafo le remarcó a los jóvenes que «La idea es mantener la memoria como presente, ella es una herramienta fastidiosa para muchos pero invalorable para otros, para nosotros por ejemplo que somos el pueblo». Sin dudas, Víctor Basterra es, fue y será una voz para la memoria, la verdad y la Justicia.
Para visitar la muestra
Los interesados en apreciar esta muestra pueden acercarse a la Escuela Normal, planta baja, de lunes a viernes de 8:00 a 20:00 horas.
Las visitas guiadas se pueden realizar en los siguientes días y horarios:
- Miércoles 11 de marzo de 18:00 a 20:00
- Martes 17 de marzo 16:00 a 18:00
- Miércoles 18 de marzo 18:00 a 20:00.
La muestra quedará expuesta hasta el jueves 19 de marzo. Ese día a las 19:00 horas tendrá lugar el acto de clausura de la misma en las instalaciones de la Escuela Normal.
:: Comunicación Institucional FHAyCS|UADER