
La Asamblea Universitaria de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) se reunió en Villaguay, el viernes 19 de diciembre. Entre los temas destacados figuran la aprobación de la Memoria Anual 2025 y una reforma del Estatuto Académico. El encuentro fue presidido por el rector de la Universidad. Abog. Luciano Filipuzzi, y contó con la participación del decano de la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales (FHAyCS), Lic. Daniel Richar, acompañado de los Consejeros y Consejaras de los diferentes claustros.
Entre las decisiones adoptadas por el órgano máximo de co-gobierno de UADER, hay que mencionar la aprobación de la Memoria Anual 2025, la cual refleja los principales hitos de los informes de gestión elaborados tanto desde el propio Rectorado como de las respectivas unidades académicas que conforman la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales, la Facultad de Ciencias de la Gestión, la Facultad de Ciencia y Tecnología, y la Facultad de Ciencias de la Vida y la Salud; cuyos informes estuvieron a cargo de sus respectivos decanos.
Por su parte, el Decano de la FHAyCS, Lic. Daniel Richar, presentó su informe de gestión, destacando los principales logros y desafíos que atravesó la Facultad durante este año. Su intervención reflejó el compromiso institucional y la responsabilidad política de la Facultad frente a un escenario nacional y provincial caracterizado por fuertes tensiones en el ámbito educativo y social.
En su discurso, Richar hizo una caracterización de la gestión iniciada en diciembre de 2024, señalando la importancia de la historia institucional de la Facultad, destacando el trabajo colectivo de su comunidad académica, que ha sido fundamental en la defensa de la educación pública y la construcción de un conocimiento crítico, al mismo tiempo que ha mantenido el compromiso con las comunidades entrerrianas. En este contexto, el Decano resaltó el rol de la universidad pública como un actor central para superar las desigualdades sociales, educativas y culturales. “Nos reconocemos en una historia profundamente ligada a la defensa de la educación pública como derecho social, a la producción de conocimiento crítico y al compromiso con las diversas comunidades entrerrianas”, expresó.
Durante la alocución, el Decano hizo referencia a que durante 2025, la FHAyCS enfrentó un contexto nacional marcado por recortes presupuestarios y un clima de deslegitimación hacia el rol del Estado en áreas esenciales como la educación, la ciencia y la salud mental. “Frente a este escenario, asumimos con responsabilidad política e institucional el desafío de sostener la actividad académica, garantizar el derecho a la educación y preservar las condiciones de funcionamiento de una Facultad diversa, masiva y territorialmente extendida en la provincia de Entre Ríos”, aseguró.
A pesar de las dificultades, el Decano destacó que más de 15.000 estudiantes eligieron cursar sus estudios en la FHAyCS, reafirmando su confianza en la institución y en la formación de profesionales en diversas áreas, como la docencia, las ciencias sociales, las artes, las lenguas y la salud mental.
Uno de los puntos más críticos que mencionó Richar fue la insuficiencia del presupuesto asignado por el gobierno provincial. Con un crédito de 22.471 millones de pesos, el 98,7% de estos fondos se destinó al pago de salarios de los aproximadamente 1.800 agentes que forman parte de la Facultad, dejando solo un 1,3% para cubrir los gastos operativos de las 66 carreras universitarias y otros programas académicos que convocan a más de 16.000 estudiantes.
Además, la situación edilicia fue otro desafío central señalado por el Decano en el informe. La FHAyCS, con 42 planes de estudio y una creciente demanda académica, se enfrenta a la falta de infraestructura propia. “Contar con un edificio propio para la FHAyCS, sobre todo en la sede Paraná, no es una aspiración futura, sino una necesidad urgente que requiere definiciones políticas concretas que den respuestas a las necesidades actuales de nuestra comunidad”, enfatizó.
Sin embargo, y a pesar de las limitaciones, la gestión de 2025 logró importantes avances. En ese sentido, el Decano especificó que se redujeron los tiempos administrativos en la tramitación de expedientes, optimizando los circuitos internos y modernizando procesos. Además, se implementaron dos nuevas carreras: la Licenciatura en Canto Popular, en la sede Concordia, y el Profesorado Universitario en Educación Especial, en la Extensión Áulica de Federación.
Asimismo, Richar detalló que se profundizó la implementación de las Prácticas Educativas Territoriales, involucrando a 1.250 estudiantes en 52 proyectos que articulan con organizaciones sociales, municipios y organismos provinciales.
En cuanto al ámbito de los posgrados, el Decano indicó que la Facultad avanzó en la creación de la Secretaría de Posgrado, consolidando su rol en la formación continua y la producción de conocimiento especializado. Durante 2025, se ofrecieron cinco carreras de posgrado, con aproximadamente 150 estudiantes involucrados, fortaleciendo el sistema educativo provincial.
“En coherencia con los principios que orientan a esta Facultad, se sostuvo una concepción plural de la vida universitaria, donde el ejercicio del pensamiento crítico, el debate democrático y la defensa de los derechos conquistados constituyen una bandera política irrenunciable. En un contexto que tiende a la simplificación y a la deshumanización de lo público, la FHAyCS reafirma su compromiso con una universidad crítica, inclusiva y socialmente comprometida”, aseveró el Decano.
Debates de relevancia en la Asamblea Universitaria
Otra de las iniciativas llevada adelante por la Asamblea Universitaria fue la reforma del Estatuto Académico, introduciendo algunas modificaciones al mismo como consecuencia de un rico e interesante debate que posibilitó alcanzar importantes consensos.
Entre los puntos destacados de la reforma estatutaria figura la creación de una Unidad de Auditoría Interna, dependiente del Rectorado, y de una Asesoría Jurídica con funciones específicas en el control de legalidad, cuyos responsables deberán contar con el aval del Consejo Superior.
Asimismo, se incorpora formalmente la figura del Consejo Social como organismo asesor de los órganos de conducción, integrado por representantes de la comunidad, con el objetivo de profundizar el vínculo de la Universidad con el territorio y con los actores sociales, productivos y culturales de la provincia.
Además, entre las reformas, se promueve la conformación de organizaciones sin fines de lucro dentro del ámbito universitario y establece que los fondos generados por el propio producido de la Universidad puedan destinarse en su totalidad a los objetivos institucionales, sin ser utilizados para solventar gastos corrientes, fortaleciendo así la capacidad de desarrollo de proyectos estratégicos.
Otra de las novedades introducidas en la reforma del Estatuto es la que viene a subsanar los desequilibrios de representación existentes entre los claustros, garantizando una representación del 51 por ciento para el claustro docente, conforme a lo establecido por la legislación nacional del sistema universitario. Además, se adopta el sistema D’Hont para la asignación de cargos en los organismos de cogobierno y en los colegios electorales, reforzando criterios de proporcionalidad, pluralismo y representación democrática.
En cuanto a las modificaciones en las reglas de política universitaria, la asamblea habilitó la posibilidad de hasta tres mandatos consecutivos para los cargos de rector y decano; además de aprobar el ordenamiento y unificación de disposiciones contempladas en normativas dispersas, instituyendo un nuevo marco normativo más coherente e integral.



