En la mañana del miércoles 10 de agosto, se llevó a cabo el sorteo de las viviendas para trabajadorxs de los sectores productivos en la Escuela Normal Rural «Juan Bautista Alberdi»; perteneciente a la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales (FHAyCS). Fue un acontecimiento vivenciado con inmensa alegría para las 12 familias que adquirirán en comodato las nuevas casas, del que participó la Secretaria de Escuelas, Prof. Sol Barrera acompañando el proceso, también los directivos de la escuela y los y las integrantes del registro de viviendas.
Las unidades habitacionales pertenecen al Programa Federal de Vivienda y Mejoramiento del Hábitat de Pueblos Originarios y Rurales. Hoy son 12 las familias que adquirieren esas viviendas en comodato, en tanto, hay 9 familias que van a seguir habitando viviendas que ya estaban construidas en Alberdi y que son unidades habitacionales que están en buenas condiciones de habitabilidad.
Todo este movimiento que producen las familias que van a ocupar las nuevas unidades habitacionales, ha generado que otras viviendas queden desocupadas. En este punto, la idea es poder ir relevando el estado de condiciones de cada una y evaluar la posibilidad de ser restauradas para que otros grupos de familias puedan acceder a ocuparlas; porque si bien el registro trata de cubrir a casi todos, hay dos familias que quedan en lista de espera hasta que estas viviendas se puedan restaurar.
Es importante destacar que para llegar al momento del sorteo de las viviendas, se atravesó un largo proceso desde 2015, que ha sido muy democrático y en el que se ha reflexionado con las familias, integrantes del registro de viviendas, acerca de la importancia de los modos de habitar una vivienda en la zona rural, que no es menor. También, con respecto a lo que implica trabajar y vivir en el mismo espacio, del hecho de tener como vecinos a los propios compañeros de trabajo y, fundamentalmente, la importancia de poder planificar y construir la vivienda propia para cuando llegue el momento de tener que entregar la vivienda recibida para darle la posibilidad a otro compañero o compañera que puedan habitar esa unidad. En este punto cabe señalar que el comodato inicial es a 2 años, previendo una renovación de acuerdo a la situación de los trabajadores, pero luego la vivienda debe ser entregada.
El proceso para la construcción de estas viviendas se inició a comienzos de 2016 mediante las tareas de adecuación de los terrenos. Las primeras gestiones fueron realizadas por la decana Mg. María del Rosario Badano, y abarcan un conjunto de unidades habitacionales destinadas a familias de trabajadores y otras como residencias para estudiantes secundarios y universitarios, tanto para la Escuela Alberdi como para Almafuerte.
En el caso de la Escuela Alberdi, la construcción de las unidades habitacionales estuvo a cargo de la Cooperativa VidaCoop; y un dato de color es que esas viviendas llevan nombres de árboles autóctonos: espinillo, algarrobo, ñandubay, aguaribay, chañar, ceibo, tala, virajú, curupí, guayabo, ombú, sauce, jacarandá, timbó.
Para el 21 de septiembre se prevé la inauguración de las viviendas. Paralelamente, desde vicedecanato se está trabajando en obras que permitan la llegada y distribución del agua en las viviendas.
:: Comunicación Institucional FHAyCS|UADER